Ecoladrillos, estrategia que une familias y protege el medio ambiente

La Secretaría Distrital de Integración Social cuenta con 13 Centros Amar que prestan atención integral a menores de edad que estén en situación o en riesgo de trabajo infantil. Bogotá, D.C, junio 16 de 2020. Sandra Johanna y Jhonatan Moncada son padres de Justín, Lizeth y Jhonatan, tres menores de edad que junto a 87 niños y niñas reciben atención integral desde el Centro Amar Candelaria de la Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS), que busca evitar situaciones de trabajo infantil o en riesgo. El programa incluye a menores que acompañan laboralmente a sus padres a los lugares de trabajo o cuando dejan a menores encargados de otros menores y de las labores del hogar. ¿Los niños y niñas vienen en contra jornada, es decir, que, si estudian en la mañana, vienen al centro por la tarde. Se brinda acompañamiento de tareas, tomas de talla y peso, actividades recreativas, deportivas y pedagógicas, apoyo nutricional, entre otros servicios¿, cuenta Viviana Lizeth Sanabria, responsable del servicio del Centro Amar Candelaria. La estrategia de ecoladrillos es una de las actividades que ha generado la participación de los niños, niñas y adolescentes desde el Centro Amar. Consiste en aprovechar las botellas y envolturas plásticas secas de algunos productos que ya no se utilizan en casa generando un mecanismo de relleno y creando un elemento sólido que puede reemplazar los ladrillos utilizados para la construcción de estructuras. Estas experiencias que se desarrollan en algunos países del mundo han generado la creación de espacios modulares basados en la utilización de este material en infraestructuras. En Taiwán, por ejemplo, la empresa Miniwiz construyó un edificio con 1,5 millones de botellas de plástico transformadas en ecoladrillos. En Bogotá, estudiantes del Colegio Distrital Antonio José de Sucre construyeron con ecoladrillos un cuarto de almacenamiento de basuras, sillas y cercas de protección de la huerta escolar. Asimismo, desde la institución educativa participaron en el diseño de un tanque de agua en una escuela rural de Cucunubá (Cundinamarca) utilizando esta estrategia ecológica. Participación de los niños, niñas y adolescentes desde el Centro Amar. Desde el Centro Amar son alrededor de 90 niños y niñas y adolescentes que, en compañía de sus familiares, se han comprometido con acciones de reciclaje y cuidado del medio ambiente haciendo de los ecoladrillos una buena práctica en casa. Johanna Bellaizán, delegada ambiental del Centro Amar Candelaria, indica que ¿uno de los beneficios tiene que ver con un mayor aprovechamiento de los residuos y con esta actividad los estamos aprovechando y generando un impacto ambiental positivo al poder reciclarlos.La segunda finalidad de estos ecoladrillos es que se puedan donar para elaborar casas a las personas de escasos recursos, tal como sucede con una fundación en Medellín". ¿Esta actividad ha disminuido la basura en la casa, botamos las bolsas de las papas normales o los empaques de leche. El resto de los paquetes ya sabemos que no se arrojan a la basura, sino que los metemos en las botellitas¿, destaca Sandra Johanna Rivera, madre de uno de los menores participantes del servicio y quien adelanta ecoladrillos en casa. Durante el periodo de cuarentena, las actividades de producción de ecoladrillos se han compartido en familia desde casa. Se espera que una vez se levanten las medidas de aislamiento preventivo articular con fundaciones y empresas que puedan seguir apoyando la implementación de esta estrategia ecológica en diferentes escenarios, fomentando en los niños, niñas y familias conciencia hacía el cuidado ambiental y el reciclaje. La Administración Distrital, a través de los 13 Centros Amar, presenta una cobertura de 1.170 cupos autorizados para atender a igual número de niños y niñas. Estos centros se ubican en Fontibón, Chapinero, Mártires, Kennedy, Candelaria, San Cristóbal, Usme, Suba, Ciudad Bolívar, Bosa, Engativá y Usaquén. (*) Con información de la Secretaría de Integración Social.

• La Secretaría Distrital de Integración Social cuenta con 13 Centros Amar que prestan atención integral a menores de edad que estén en situación o en riesgo de trabajo infantil.

Bogotá, D.C, junio 16 de 2020. Sandra Johanna y Jhonatan Moncada son padres de Justín, Lizeth y Jhonatan, tres menores de edad que junto a 87 niños y niñas reciben atención integral desde el Centro Amar Candelaria de la Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS), que busca evitar situaciones de trabajo infantil o en riesgo.

El programa incluye a menores que acompañan laboralmente a sus padres a los lugares de trabajo o cuando dejan a menores encargados de otros menores y de las labores del hogar.

¿Los niños y niñas vienen en contra jornada, es decir, que, si estudian en la mañana, vienen al centro por la tarde. Se brinda acompañamiento de tareas, tomas de talla y peso, actividades recreativas, deportivas y pedagógicas, apoyo nutricional, entre otros servicios¿, cuenta Viviana Lizeth Sanabria, responsable del servicio del Centro Amar Candelaria.

La estrategia de ecoladrillos es una de las actividades que ha generado la participación de los niños, niñas y adolescentes desde el Centro Amar. Consiste en aprovechar las botellas y envolturas plásticas secas de algunos productos que ya no se utilizan en casa generando un mecanismo de relleno y creando un elemento sólido que puede reemplazar los ladrillos utilizados para la construcción de estructuras.

Estas experiencias que se desarrollan en algunos países del mundo han generado la creación de espacios modulares basados en la utilización de este material en infraestructuras. En Taiwán, por ejemplo, la empresa Miniwiz construyó un edificio con 1,5 millones de botellas de plástico transformadas en ecoladrillos.

En Bogotá, estudiantes del Colegio Distrital Antonio José de Sucre construyeron con ecoladrillos un cuarto de almacenamiento de basuras, sillas y cercas de protección de la huerta escolar. Asimismo, desde la institución educativa participaron en el diseño de un tanque de agua en una escuela rural de Cucunubá (Cundinamarca) utilizando esta estrategia ecológica.

Desde el Centro Amar son alrededor de 90 niños y niñas y adolescentes que, en compañía de sus familiares, se han comprometido con acciones de reciclaje y cuidado del medio ambiente haciendo de los ecoladrillos una buena práctica en casa.

Johanna Bellaizán, delegada ambiental del Centro Amar Candelaria, indica que ¿uno de los beneficios tiene que ver con un mayor aprovechamiento de los residuos y con esta actividad los estamos aprovechando y generando un impacto ambiental positivo al poder reciclarlos.La segunda finalidad de estos ecoladrillos es que se puedan donar para elaborar casas a las personas de escasos recursos, tal como sucede con una fundación en Medellín".

 ¿Esta actividad ha disminuido la basura en la casa, botamos las bolsas de las papas normales o los empaques de leche. El resto de los paquetes ya sabemos que no se arrojan a la basura, sino que los metemos en las botellitas¿, destaca Sandra Johanna Rivera, madre de uno de los menores participantes del servicio y quien adelanta ecoladrillos en casa.

Durante el periodo de cuarentena, las actividades de producción de ecoladrillos se han compartido en familia desde casa. Se espera que una vez se levanten las medidas de aislamiento preventivo articular con fundaciones y empresas que puedan seguir apoyando la implementación de esta estrategia ecológica en diferentes escenarios, fomentando en los niños, niñas y familias conciencia hacía el cuidado ambiental y el reciclaje.

La Administración Distrital, a través de los 13 Centros Amar, presenta una cobertura de 1.170 cupos autorizados para atender a igual número de niños y niñas. Estos centros se ubican en Fontibón, Chapinero, Mártires, Kennedy, Candelaria, San Cristóbal, Usme, Suba, Ciudad Bolívar, Bosa, Engativá y Usaquén.

(*) Con información de la Secretaría de Integración Social.